El ferrocarril encoge los mapas

24 de diciembre de 2011
Como esos jerseys de lana que, si se lavan a temperatura inadecuada, se quedan en varias tallas menos, el ferrocarril ha encogido el mapa de España en los últimos 70 años.

Y no porque las ciudades se hayan mudado de sitio sino porque viajar entre ellas exige hoy día mucho menos tiempo que en 1942. Es indudable que los aviones también han encogido el mapa pero en distancias hasta unos 600 km -que más o menos es la que hay en los trayectos desde Madrid hasta la periferia- el ferrocarril está robando viajeros al tráfico aéreo de manera paulatina.

En el "Anuario del ferrocarril 2011" que edita la Fundación de los Ferrocarriles Españoles aparece este croquis (Isocronas) con la disminución de tiempo de los viajes por tren entre Madrid y muchas ciudades españolas. A medida que va avanzando el calendario, los círculos van disminuyendo de radio para aproximarse al centro de la circunferencia.


En parte, esta disminución de horarios se ha debido a la construcción de líneas de alta velocidad de nuevo diseño (a Sevilla, Málaga, Valladolid, Barcelona, Valencia) pero también a la mejora del material ferroviario y de los trazados de la red convencional, con las electrificaciones que se han efectuado en todos esos años, la mejora de vías, la construcción de variantes de trazado o la eliminación de inversiones de marcha en algunos puntos importantes de la red.

He escaneado un trayecto de la guía de horarios de Renfe de 1948 correspondiente a los trenes entre Madrid y Barcelona, por Lleida, uno de las tres posibles opciones de viaje que había entonces, ya que podía irse también por Caspe y por Lleida y Manresa. Este es el resultado.


Aparecen ahí dos trenes directos: uno tardaba casi 24 horas y el otro -un expreso con pocas paradas- salía de Madrid-Atocha a las 14 horas para llegar a Barcelona a las 9 de la mañana del día siguiente. Ese mismo trayecto pero por la línea de alta velocidad puede hacerse ya en 2 h 30', en trenes directos sin paradas. Por eso el tren ha alcanzado una cuota de casi el 50% en relación con el avión entre Madrid y Barcelona, pero es mayor del 80% en trayectos como Madrid-Sevilla o Madrid-Valencia.

Todos estos y muchos más datos interesantes sobre el ferrocarril se pueden consultar en la enciclopedia interactiva Ferropedia en cuyos contenidos tengo el gusto de participar. También en la web de la revista especializada Vía Libre de la que también soy colaborador.